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Instantaneas Verano 2010
En Agosto estuve una semana en La Pineda (Tarragona), al lado de Salou. Unos días de playa y descanso, con visita obligada a Port Aventura. A la vuelta pasé por el Pueblo para aplicar una desintoxicación de estrés a base de naturaleza y ausencia de internet, movil, etc.
Os dejo algunas imagenes que resumen el verano…
Túnez: Pisando el continente africano
He estado en Túnez con la novia del 19 al 26 de Agosto. Estuvimos en Hammamet, una de los lugares turísticos del país, concretamente en la zona hotelera de Yasmine Hammamet a una hora de la capital.
Volamos al mediodía con la compañia Tunis Air, en un vuelo charter que tardó dos horas en llegar, una vez allí se debe retrasar el reloj una hora. Llegamos a la terminal II del aeropuerto de Tunez-Cartago y antes de montar en el autobús que nos llevaría al hotel cometimos la primera y última novatada: en un momento de confusión mientras cargabamos las maletas nos endosaron dos flores de bienvenida a 2 euros la flor. Nunca mais.
Una vez en el hotel, tuvimos bastante suerte con la habitación ya que tenía vistas a la piscina y al mar, ambos a un paso de distancia ya que estaba en primera linea de playa sin un paseo siquiera de por medio. En cuanto a las instalaciones bastante decentes: restaurantes, bares, terraza, poolbar, gimnasio, centro de masajes, etc.
En el tema de limpieza estamos muy contentos, no tanto con la animación nocturna del hotel, bastante limitada y terminando muy pronto a eso de las 23, además no contaban con chicas en el equipo, todo se lo organizaban un grupo de unos 8 tios, que se vestían de mujer si hacía falta. Las únicas empleadas de sexo femenino se encontraban en el servicio de limpieza, un punto negativo para los tunecinos que no saben todavía que es eso de la paridad.
El régimen de todo incluido además del acceso a los servicios del hotel, bebidas, etc, nos ofrecía dos cenas adicionales, una folclórica con espectáculo incluido en el restaurante Sheherazade dentro de la Medina de Yasmine Hammamet y otra cena a elección en alguno de los otros hoteles de la misma cadena. Reservamos la primera de ellas para el viernes y la segunda el martes en el restaurante asiático Thethy´s.
El sábado contratamos una excursión para conocer la zona, duraba todo el día y realizaba las siguientes paradas: Las termas d’Antonino en Cartago, el pueblo Sidi Bou Said, de los más bonitos de Tunez con sus casas blancas y azules; después de comer visita al museo del Bardo, con una de las colecciones más importantes de mosaicos romanos y para terminar antes de volver al hotel, un par de horas en el Zoco de Túnez capital, donde había que hacer frente al acoso de los comerciantes y donde impera el «regateo» y no existen los precios fijos.
El resto de tiempo lo dedicamos al relax, la piscina, la playa, pasear por la zona y disfrutar del buen tiempo. Unos días así los considero necesarios para descansar de verdad y desconectar. Volví con una gran pena, eso significa que han sido unas buenas vacaciones.
Escapada a Mundaka
El verano está al caer, apenas quedan unos días para darle la bienvenida pero no he podido evitar anticiparme y pasarme por la playa este fin de semana, aprovechando el buen tiempo.
Echaba de menos el olor de la arena, así que el sábado madrugué y me fui con mi novia a Mundaka con idea de pasar el día. Estuvimos en Laidatxu, una playa pequeña y poco profunda, que parece estar pensada para la gente del municipio, no solo por su tamaño, sino también por los accesos a la misma y las posibilidades limitadas para aparcar el coche.
Después de unas horas tomando el sol nos acercamos a comer a Portuondo, un barrio a las afueras de Mundaka donde hay instalado un camping. Éste cuenta con un restaurante y una pollería a los que se puede ir a comer libremente sin estar alojado.
Desde la pollería hay unas vistas preciosas al mar y a la playa de Laida y la comida es la típica de estos sitios: pollo, patatas, pimientos, ensalada, postres caseros, etc, todo ello a buen precio. Recomendable comer en la terraza ya que en el interior del local se pasa bastante calor.
A la tarde bajamos de nuevo a la playa, a por otra sesión de toalla baño incluido, hasta que el sol empezó a perder intensidad en el cielo.
El próximo fin de semana repetiremos, no sabemos si en la misma playa, pero si el tiempo acompaña volveremos a pisar arena.
Perdidos en Brujas
Brujas es una ciudad que merece la pena enormemente, he vuelto encantando después de haber pasado 4 días allí. Os cuento más en detalle como ha sido la experiencia.
En lugar de marcarnos un Bilbao-Bruselas en avión con escala en Madrid, hicimos la primera parte del viaje en autobus y después Madrid-Bruselas en avión. El viaje se alarga y se hace más pesado pero estamos en tiempos de crisis y hay que recortar gastos en la medida de lo posible.
El Jueves a las 14.15 estabamos en el aeropuerto de Bruselas, tras comer allí mismo cogimos el tren hasta Brujas haciendo transbordo en la estación Central de Bruselas. Este trayecto dura una hora aprox., a las 18 de la tarde estabamos en la habitación 107 del hotel Het Gheestelic Hof.
Quedamos muy satisfechos con este hotel. Es muy céntrico, estamos hablando de 5 minutos a pie de la plaza Markt, que es el centro neurálgico. Pequeño, acogedor, tranquilo son algunos de los adjetivos que escogería para definirlo. El trato de los encargados estupendo (digno de mención el esfuerzo de la recepcionista por expresarse en castellano) el desayuno estaba incluido en el precio y a pesar de no ser un festín no eché en falta nada.
Brujas es hasta la fecha la ciudad más bonita en la que he estado. Mi primer contacto con ella se puede decir que fue de noche y os puedo asegurar que a esas horas es como un auténtico cuento de hadas. El silencio en las calles (todas adoquinadas), el estilo medieval de las casas, los canales y la iluminación te envuelven en una atmósfera de romanticismo absoluto.
De día se dejan ver los turistas, pero sin ser agobiante. Te das cuenta de que todo está realmente limpio y bien cuidado. El nivel de vida es bastante alto, se nota en las gentes, no ves a nadie pidiendo en la calle, se nota en las casas, en los coches. Yo por mi afición a estos me fije especialmente y vimos Masseratis, Bentleys, Porsches, los Audi, BMW y Mercedes eran habituales.
Al ser una ciudad pequeña se ve rápido, pero creo que no es un lugar hecho para las prisas. Es mucho mejor disfrutar de ella con calma, la zona del Lago del Amor por ejemplo es ideal para pasear. Sentarse en una terraza a disfrutar de una buena cerveza no tiene precio, existe mucha tradición cervecera, hay variedad hasta para saciar al más exigente. Por otro lado, abundan las chocolaterías, sus escaparates son un auténtico espectáculo y resulta imposible resistirse a probar algún que otro bombón de vez en cuando, además no son caros. Siguiendo con este tema, a la hora de comer hay muchos establecimientos y hasta el más pequeño tiene su terraza. Cuidan la decoración y los detalles al máximo, en ninguno faltan las velas u otros detalles similares. La pega es que no es barato, la mayoría tienen varios menus a elegir pero casi ninguno baja de los 20€. Si se va con presupuesto limitado y no sois demasiado exigentes, cuesta encontrar sitios baratos pero los hay.
A la hora de haceros entender en Brujas no tendréis problema. Se hablan 4 idiomas: Holandés, Francés, Alemán e Inglés. Como es un lugar turístico te pueden chapurrear en Castellano incluso. La mezcla de idiomas es algo que nos llamó la atención, te puedes encontrar la palabra Brujas escrita de mil formas Brugge, Bruges,… es un caos.
Por ir terminado os cuento algunas de las cosas que se pueden ver en Brujas. La plaza Markt o plaza del mercado con su Atalaya de 300 y pico escalones (no tan exigente como la basílica de San Pedro en Roma), la plaza Burg, la basílica de la Santa Sangre (tiene un relicario con la supuesta sangre de Cristo), el Lago del Amor, el monasterio De Wijngaard, iglesias y museos varios. Podréis también alquilar un paseo en barca para ver la ciudad desde los canales, que dura unos 30 minutos y cuesta 6 € o un paseo en carruaje por 35€. El alquiler de bicis es muy típico también.
El Lunes cogiamos el avión de vuelta con bastante pena. Esta ciudad tiene algo especial que te cautiva, es bonita, tranquila, segura… un cuento de hadas.
Próximo destino Brujas
Las vacaciones de Semana Santa se acercan y yo tengo los deberes hechos, me piro con mi novia a Brujas, la Venecia del norte, la ciudad de los canales y el encanto, un lugar de cuento de hadas.
Existen muchos destinos dentro de Europa, pero queriamos escapar de las rutas de “navegación” habituales: Londres, París, Ámsterdam, Berlín,… En este intento por ser menos convencionales hemos escogido Brujas, una ciudad pequeña, menos acosada por el turismo y que permite ser vista sin agobios asimilando mejor su cultura.
Volamos a Bruselas y de allí nos trasladaremos a Brujas en tren para pasar 4 días, durante los cuales estaremos alojados en un pequeño hotel cerca del centro.
Fotos y detalles a la vuelta.
Puerto Madero
Después de un par de semanas en Buenos Aires, Puerto Madero es una de las zonas que más he visitado, casi siempre para ir a cenar, dado que se encuentra a unos 15 minutos andando de mi hotel.
Paseando junto al rio, no puedo dejar de compararlo con Abandoibarra en Bilbao, aunque su magnitud es mayor. Para mi sorpresa existe también un puente construido por Santiago Calatrava llamado Puente de la Mujer.
La zona es muy tranquila, se puede ir paseando largo rato y de noche está muy bien iluminado. Existen multitud de restaurantes, por ahora he cenado en Siga la vaca, La Parolaccia y La caballeriza y ya tengo puesto el punto de mira en Las Lilas, del que me han hablado muy bien.
Seguiré informando desde la Pampa…
Llegó la nieve
No sólo se deja ver en la montaña, desde ayer la nieve se ha acercado hasta lugares próximos a la costa aquí en el Norte. Hoy mismo en Bilbao caían tímidamente algunos copos y éste era el panorama ayer en Orduña.
Al caer la noche se complicó el tiempo y en cuestión de minutos el estado de las carreteras empeoró considerablemente.
Parece que también la nieve se apunta a las rebajas.
Expo Zaragoza 2008
El 28 de Agosto cuando todavía faltaban un par de horas para oir cantar al gallo, preparé unos bocadillos, cargué la mochila en el coche y puse rumbo a Pamplona para recoger a Corroza, un colega del curro. Nuestro destino: La Expo.
Sabias fueron las recomendaciones de conocidos que ya habían estado. Una gorra y agua abundante para hacer frente a una larga jornada donde el protagonista es el sol.
En un dia es imposible verlo todo, por lo que hay que escoger lo más destacado. Muchos pabellones son auténtica morralla, otros en cambio valen la pena. La temática del agua limita mucho las posibilidades, ya que lo que más atrae, al menos a mi, es conocer la cultura de esos paises.
Los espectaculos son más atractivos. El hombre vertiente es muy original, para mi lo más llamativo del día, pero las colas son enormes.
Os dejo algunas imagenes que resumen la jornada.
Mallorca: La isla mayor
Este año el destino elegido para pasar unos días de sol y playa ha sido Mallorca, puesto que en el norte andamos un poco escasos, al menos de sol.
Además de estos requisitos, queríamos una zona de ambiente, para poder salir a la noche, así que finalmente elegimos Magalluf, ideal para practicar inglés porque ni los camareros te entienden cuando les pides en castellano.
Antes de marchar, alquilamos un coche por internet en www.doyouspain.com, para enriquecer un poco las vacaciones viendo alguna cosa. Indicamos el aeropuerto de Palma de Mallorca como punto de recogida y entrega y la propia compañia se encargó de recogernos en minibus y llevarnos a la oficina más cercana que se encuentra a 3 minutos. La única pega es que la entrega del vehículo llevó su tiempo puesto que había bastante gente esperando, pero finalmente nos entregaron un Skoda Roomster 1.4 TDI.
La playa de Magalluf está muy bien, limpia, arena fina, aguas muy tranquilas y transparentes, etc. Hay que decir también que para ser Agosto no estaba muy concurrida lo cual se agradece.
Llegada la noche, las calles se iluminan con los letreros de las discotecas, parece Las Vegas. Los locales en los que hemos pasado más tiempo han sido The Office, Mambo´s y Alex Pub, todos ellos de entrada libre. Para tomar algo en plan terraza soliamos ir al Chaplins.
Una noche la dedicamos exclusivamente a la BCM, una macrodiscoteca que está en el mismo Magalluf. La entrada cuesta 30 € con barra libre toda la noche y de regalo una toalla bastante patriótica y un gorro. La animación está muy bien, gogo´s, cañones de humo, luces, etc. Supongo que cada día habrá una fiesta diferente.
A continuación os dejo algunas fotos.
En el aire con la puesta de sol detrás y divisando tierra.
Port D’ Andratx, una zona elitista de Mallorca, que reune a gente de dinero, no hay más que ver los barquitos.
El Cap de Formentor situado en el extremo norte de la isla. Merece la pena soportar el infierno de carretera para llegar hasta allí a cambio de unas espectaculares vistas.
Cala Murada es una de muchas calas ubicadas en la costa oeste de la isla, en una zona llamada Calas de Mallorca. Aparcamos el coche y no pudimos resistirnos a darnos un baño. También estuvimos en Cala Anguila.
Una caminata por el Paseo Marítimo de Palma de Mallorca para estirar las piernas.
Además estuvimos en otros lugares como el Puerto de Pollença o visitando las famosas Cuevas del Drach en Porto Cristo, cuyo nombre proviene de la antigua creencia de que eran habitadas por un dragón.
Roma Victi
El fin de semana pasado cogí las maletas e hice una escapadita a nada más y nada menos que la capital de Italia, Roma. A continuación os cuento como fue la experiencia y los lugares que pude ver.
El viaje comienza el Viernes a las 17.30h en el aeropuerto de Bilbao, esperando en la puerta de embarque para coger el avión con destino a Madrid. Desde aquí cogería después un segundo avión que me dejaría en el aeropuerto de Roma, Fiumicino, a las 22.15h.
El Fiumucino Aeroporto está a unos 30 km de la ciudad y entre otras opciones, está la de coger el Leonardo Express, un tren que te deja en la misma estación de trenes de Roma, Termini, directamente sin paradas. El viaje dura unos 30 minutos y el billete es algo caro, 11 €, el cual por cierto no os olvidéis de validar en las máquinas.
La primera noche, tras dejar la maleta en el hotel, muy céntrico pero algo cutre, dimos un paseo por la zona hasta llegar al Coliseo. Después de empaparnos con la belleza del lugar, fuimos a descansar.
El Sábado a primera hora, cogimos el metro hasta la parada de Ottaviano, la más próxima al Vaticano. Primero visitamos los Museos Vaticanos:
Incluida la Capilla Sixtina de Miguel Angel, donde «no se pueden hacer fotos» y hay que «hablar en voz baja»:
Luego entramos en la famosa Plaza San Pedro, la cual es enorme, al igual que las colas que se forman para acceder a la basílica. Pero no os asustéis, increiblemente, las colas para entrar tanto a los museos como a la basílica, van bastante rápido.
La ascensión a la cúpula de la basílica consta de 521 peldaños. Se puede subir andando (5€) o en ascensor (7€) parte del recorrido. En cualquiera de los casos es una autentica tortura, sin embargo, nos deja imagenes como éstas:
Después de comer algo y recuperar fuerzas, hizimos un tour por varias plazas y monumentos importantes: Piazza del Popolo (Plaza del pueblo), Plaza de España, Fontana di Trevi, Plaza de la República:
De todos ellos destacaría la Fontana di Trevi, es realmente preciosa y está ubicada en una plaza muy pequeña, lo que la confiere un aspecto de mayor grandeza.
Una agradable cena en una terraza y una cerveza Peroni cerraron el día del Sabado.
El Domingo a la mañana fue el momento elegido para visitar con tranquilidad el más que conocido Coliseo. Protagonista de películas como Gladiator, es una construcción grandiosa que desgraciadamente se encuentra en decadencia. El expolio sufrido a lo largo de los años desde el fin del Imperio Romano, lo ha dejado desnudo por dentro y parcialmente derruido por fuera.
Para hacer más completa la visita cogimos una guía que nos fue explicando toda la historia que rodea a esta emblemática construcción.
La guía incluía explicaciones sobre los arcos de Tito y Constantino, así como la visita al Foro Romano.
A la tarde fuimos andando hasta el barrio Trastevere, al otro lado del rio Tiber. En el camino pudimos ver lugares como el Monumento Nazionale a Vittorio Emmanuelle II, un edificio blanco de proporciones descomunales, el Panteón y la Piazza Navona.
Con esto termina la visita. El Lunes, día festivo en Italia con motivo de la República, amaneció lloviendo. Tras organizar el equipaje y dejar el hotel, nos dió tiempo a visitar la basílica de Santa Maria la Maggiore, antes de volver a casa.
Roma es una ciudad preciosa, con muchos lugares para visitar, donde todo está construido a lo grande, lo que da una idea de lo que fue esta ciudad antaño.
El kiwi volador 
